Este servicio ofrece al Cuidador momentos de descarga emocional, aportando cierto grado de bienestar, así como la información que resulte necesaria en torno a la enfermedad (sus inicios, sus cambios, su evolución, las diferentes situaciones que pueden ir surgiendo y cómo afrontarlas…) Es un servicio que satisface a todos cuántos lo reciben, ya que se tratan aspectos que van desde cómo comunicarse con el enfermo, a la Elaboración del Duelo, pasando por temas tan importantes como las fases de la enfermedad, afrontar los cambios,…
Así pues, este servicio que empezó a funcionar en el año 2.005 consiste básicamente en ayudar a la familia, especialmente al cuidador principal, a situarse mejor respecto a la tarea de cuidar al enfermo proporcionándole información, soporte y regulación. El apoyo que se presta permite a los beneficiarios restablecer sus rutinas habituales. Del mismo modo, el apoyo emocional prestado es fundamental para evitar que el cuidador “se queme”, se canse y no pueda continuar desarrollando su labor de cuidar. No debemos olvidar que, si queremos atender a los enfermos, tenemos que CUIDAR AL CUIDADOR.